Los japoneses podrán guiar a sus espermatozoides con un joystick

Fué la sensación de la Feria Video Games Tokio 2010. Se trata de la V-Ray, una consola de forma alargada, con un joystick capaz de guiar (o desviar) los espermatozoides de un señor hacia el óvulo, situado adentro de su señora esposa.

“¡Hay muy poco tiempo!”, explicó casi a los gritos el técnico encargado de la presentación, un japonés, “enseguida después del, llamémosle coito, hay que agarrar a la señora e insertar en su, perdón, vagina, la consola, que como ven, es muy similar a un, bueno, vibrador. ¡La consola que consuela, ja ja!”, intentó distender el oriental, visiblemente incómodo. “Y con el joystick guiamos a estas cositas blancas que se llaman espermatozoides hacia el óvulo para que entren ahí y después nace un bebé...”

La consola V-Ray viene provista en su parte posterior de dos puertos USB, para el joystick y el monitor, y un cable para el enchufe. Cuando es introducida en una mujer recién impregnada, los sensores de la punta detectan las frecuencias de los espermatozoides y los reproduce en el monitor con forma de navecitas espaciales. Mediante pequeños impulsos eléctricos gestionados desde el joystick, es posible guiar a las naves hacia el óvulo, que aparece como una esfera en la parte superior de la pantalla, parecida a la Estrella de la Muerte de Star Wars.

Además, para hacerlo más ameno, se le agregaron al juego principal algunos puzzles optativos y un sudoku.

"¡Los metí de nuevo!"

Según la revista especializada Gamers, la V-Ray es “endemoniadamente adictiva”. “He llegado a echarme cuatro polvos en una noche, sólo para seguir jugando”, confesó Ray Judd, redactor de la revista, “pero tuve que dejarlo, las putas no son gratis. Además predigo que esta consola está destinada al fracaso. Los japoneses tendrían que haber previsto que el gamer promedio es un nerd que debuta a los 40 años con su tía borracha, durante una fiesta de Navidad, mientras los demás comen malvaviscos.”